Ferran Bel será el representante permanente de la patronal de las pymes catalanas, Pimec, en Madrid. El que fuera alcalde de Tortosa entre 2007 y 2018, diputado en el Congreso durante varias legislaturas por Convergència i Unió (CiU) y el PDeCAT; y senador por Tarragona, reforzará “la función de defensa y representación de las pymes catalanas, con una interlocución directa y permanente con las administraciones estatales e instituciones con sede en Madrid, así como con el resto de los agentes sociales y otros grupos de interés”, tal y como ha anunciado la organización empresarial este jueves.
La función de Bel, de 58 años, será la de mantener “las relaciones institucionales” y detectar “oportunidades para hacer crecer la visibilidad y reputación de Pimec en el ámbito estatal”. También trabajará de forma coordinada con el gabinete de presidencia y el área institucional de la patronal de pequeñas y medianas empresas catalanas, y con la delegación que esta tiene en Bruselas. Además de otras organizaciones con objetivos comunes como Conpymes o la Plataforma Multisectorial contra la Morosidad.
La patronal catalana cuenta con cerca de 141.000 socios y participa en 713 mesas de diálogo social en Cataluña. Un peso que considera suficiente para resultar un interlocutor válido también en la capital, donde aspira a formar parte de organismos como el Consejo Económico y Social (CES), en el que se encuentran la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE). Las tensiones entre la principal patronal catalana, Fomento del Trabajo, y CEOE han sido varias en los últimos años. Sin embargo, la relación entre Fomento y Pimec también resulta algo tirante.
Para el presidente de la patronal de las pymes catalanas, Antoni Cañete, “del mismo modo que tenemos estructura en Bruselas, la debemos tener en Madrid para poder defender los intereses de las pymes allí donde se toman las decisiones que les afectan y donde se negocian y aprueban las medidas económicas y empresariales”. Y ha señalado que con el nombramiento de Bel y el refuerzo de la estructura en la capital buscan garantizar “que toda la normativa que viene de Bruselas se traspone adecuadamente en Madrid, teniendo en cuenta las necesidades de las pymes”.
Baja representación
El hecho de que Cepyme, la patronal nacional de las pymes, sea una filial de CEOE también está detrás del interés de Pimec por asentarse en Madrid, donde operan muchas pequeñas y medianas empresas catalanas. El último movimiento en esta estrategia de reforzamiento estructural en la capital tuvo lugar en noviembre del año pasado, cuando la organización presentó su delegación Pimec Jóvenes en Madrid, “para compartir experiencias, contactos y actividades con los empresarios jóvenes de esta organización en Cataluña”, según declaró entonces Cañete.
En aquel momento, el presidente de Pimec volvió a manifestar su desencanto con la “baja representación de la que gozan las pymes”, y reclamó que estás “puedan tener voz propia”, a partir de una “configuración de la representación empresarial de ese ámbito”. “La pequeña y mediana empresa catalana representa el 25% del total estatal y aproximadamente cuenta con el 50% de las startups. Tenemos un papel fundamental en el desarrollo del tejido productivo español”, recordó.
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